El jefe del Ejecutivo ha abogado en el Congreso de los Diputados por las energías renovables y la protección de los consumidores vulnerables ante la subida de los precios de la electricidad. Además, ha afirmado que la sociedad catalana apuesta por la concordia frente a los discursos que buscan confrontar.
Durante la sesión de control al Ejecutivo en la Cámara Baja, Pedro Sánchez ha subrayado que «el Gobierno de España no va a adelantar las elecciones generales ni a disolver de manera anticipada las Cortes» porque «este es un Gobierno con sentido de Estado que va a anteponer los intereses generales a cualquier otro tipo de interés».
En su respuesta a la intervención del diputado Pablo Casado, del Grupo Parlamentario Popular, el presidente ha añadido que los comicios se convocarán «cuando corresponda» y que «los partidos que estamos aquí presentes legítimamente competiremos para ganar esas elecciones». «Así es como interpretamos y entendemos el patriotismo democrático», ha manifestado.
Las prioridades actuales del Gobierno -ha indicado Sánchez- son superar la emergencia sanitaria del COVID-19, luchar contra la desigualdad, ensanchar libertades y derechos, consolidar la recuperación económica y la creación de empleo y aprovechar los fondos europeos para modernizar la economía y ganar en competitividad. «Tenemos muy claro cuál es nuestra responsabilidad con España y con los españoles. España necesita estabilidad y necesita recuperación económica. Y este Gobierno va a dar estabilidad y recuperación económica», ha señalado.
«Desde la diferencia y la discrepancia política que se ha manifestado en muchas sesiones de control, le deseo en lo personal lo mejor», le ha dicho el jefe del Ejecutivo a Pablo Casado al comienzo de su intervención.
Concordia y unión ante los desafíos
Respecto a la eficiencia de las políticas para la recuperación, asunto planteado por la diputada Míriam Nogueras, del Grupo Parlamentario Plural, Sánchez ha expuesto que el Gobierno adoptó «multitud de medidas para resistir el embate de la pandemia», luego reactivó la economía y ahora, con la ayuda de los fondos europeos, está consolidando el crecimiento y la creación de empleo.
A pesar de toda esa labor, concretada en iniciativas en favor de las pequeñas y medianas empresas como los ERTE y los Créditos ICO, «queda mucha tarea por delante» durante los «dos años que restan de legislatura», ha remarcado.
Ante esos retos -ha argumentado Sánchez-, «lo más importante es la unión, es sumar fuerzas, es entender que es mucho mejor compartir que competir, que es definitivamente mucho más interesante colaborar que confrontar». El jefe del Ejecutivo ha defendido que «la sociedad catalana lo que quiere es superar el trauma del año 2017, volver a restablecer la convivencia, apostar por la concordia y, en definitiva, dejar atrás discursos que evidentemente no corresponden a los desafíos que tienen por delante la sociedad catalana y la sociedad española».
En su respuesta, el presidente también ha destacado el «profundo respeto» del Gobierno por «todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas de la sociedad catalana, voten lo que voten y piensen lo que piensen», y ha reclamado que, del mismo modo, no se «falte al respeto al resto de los españoles».
Protección de los más vulnerables
El jefe del Ejecutivo ha repasado algunas de las medidas adoptadas ayer por el Consejo de Ministros para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos, como la subida del Salario Mínimo Interprofesional a 1.000 euros o la regulación de las becas y ayudas al estudio para el curso 2022-2023. «Este Gobierno avanza en todo lo que representa derechos y libertades de nuestro país», ha afirmado en su contestación a Inés Arrimadas, del Grupo Parlamentario Ciudadanos.
En relación con la subida de los precios de la electricidad, Sánchez ha sostenido que todos los países están respondiendo a esa crisis con políticas similares. Por una parte, apostando por las energías renovables, que son las más competitivas y garantizan la autonomía energética; una de las primeras medidas que adoptó el Ejecutivo fue precisamente incentivar el autoconsumo, que está creciendo a unas tasas inéditas, según ha explicado Sánchez.
Por otro lado, se está protegiendo a los usuarios más vulnerables; en el caso de España, un millón y medio de consumidores se benefician ahora mismo de distintas modalidades de bonos sociales para garantizar el suministro energético a unos precios razonables. En esa línea -ha recordado-, en el último Consejo de Ministros se aprobó una nueva prórroga del ‘escudo social’ para que, hasta que se apruebe la Ley de Vivienda, estén prohibidos los desahucios de las familias vulnerables.
«En definitiva, quedan muchísimas cosas por hacer, los desafíos que tenemos por delante son de una enorme trascendencia, de una enorme gravedad. El principal es la desigualdad, la desigualdad social y territorial. Y en eso está el Gobierno empeñado», ha concluido el presidente.