Las propuestas académicas se emplazan en la calle Selgas, en el casco antiguo
Recuperar una manzana urbana, céntrica pero desprovista de vida comercial, es el objetivo de los proyectos finales en Arquitectura realizados por estudiantes de la Universidad Politécnica de Cartagena para un emplazamiento en la calle Selgas del casco antiguo.
“Era conocida como ‘la calle de las tiendas’ y llegó a tener 24 negocios y comercios, de los que no ha sobrevivido ninguno”, explica en su Trabajo Final de Grado José Francisco Abril Portillo, quien propone un centro de ocio, formación e integración juvenil que estaría delimitado por fachadas preexistentes.
El espacio diseñado contaría con área deportiva, incluyendo un skatepark, un rocódromo y toboganes de gran altura, así como un parque infantil y zonas de exposición y reuniones, un graderío y un pequeño atrio, además de oficinas, una cafetería y un comedor social.
Los jóvenes “necesitan un espacio donde poder estar, un lugar donde reunirse, pasar el tiempo, donde pedir ayuda, formarse, escuchar y que te escuchen, un lugar donde integrarse y socializar”, explica en su proyecto el ya arquitecto por la UPCT.
El proyecto académico, dirigido por los profesores Montserrat Solano y Antonio Cerezuela, también pretende ser un lugar de apoyo para las distintas asociaciones de Lorca, que puedan utilizar este espacio para mejorar y ampliar sus servicios, como en el trabajo de otro estudiante de la UPCT para concluir sus estudios en Arquitectura: Carlos Barrero Nicolás.
Barrero ha diseñado una sede para el tejido asociativo lorquino inspirada en el paisaje de Lorca y en las proporciones de su casco antiguo. Su trabajo final también fue dirigido por Solano y Cerezuela y también está emplazado en esta zona deteriorada de la ciudad del Sol.
Centro de sinergias creativas
Por otro lado y también dirigido por los profesores Solano y Cerezuela, el trabajo de Amanda Sarabia García plantea un equipamiento cultural para reivindicar la importancia que ha tenido la artesanía a lo largo de la historia en Lorca. “Servirá para atraer a nuevos emprendedores que impulsarán sus proyectos y sus nuevas formas de trabajo, de manera que, entre todos, creen sinergias creativas”, explica la alumna.
Su propuesta es un centro donde se impartirían cursos de iniciación en las distintas disciplinas artísticas, tanto de forma individual como colectiva, y en el que los usuarios se podrían formar e investigar de manera independiente, experimentar, crear, producir y desarrollarse como artistas y futuros empresarios.
“Un espacio de creación donde los más experimentados en el mundo artesanal enseñarán a los jóvenes las técnicas tradicionales y, por otro lado, los jóvenes introducirán a los mayores en las nuevas tecnologías”, añade la arquitecta titulada por la UPCT.